La cuarta versión regional y segunda nacional del evento, surge con la intención de problematizar aspectos de la profesión contable respecto al rol que desempeña en las organizaciones, dado que, en la sociedad contemporánea, la profesión ha sido cuestionada por sus implicaciones en casos de corrupción, los cuales atentan contra los objetivos de bienestar en una sociedad.  Desde las reflexiones que suscita el espacio de reunión estudiantil, nace la preocupación de comprender las prácticas organizacionales que, por un lado, generan valor a la sociedad, y por otro, atentan contra la confianza y el buen nombre de la profesión.

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Las interacciones sociales que se dan al interior de las organizaciones establecen parámetros de comportamiento que podrían incidir positiva o negativamente en la relación de la entidad con la sociedad. Lo anterior es un tema propicio para poner en discusión desde perspectivas académicas, tanto desde la ética profesional como desde la normalización de la corrupción[1] en el entorno organizacional, condiciones que los estudiantes experimentan, de forma directa, en la práctica laboral o por disertaciones con terceros.  Por lo tanto, entender cómo se construyen las interacciones entre actores que participan consciente o inconscientemente del daño social y los nuevos profesionales, aportará a la discusión sobre los desafíos que enfrenta la profesión en el espacio organizacional-contable.

 

Lo anterior, también permitirá generar un espacio de reflexión en torno a la responsabilidad de los agentes en aspectos referentes a “la normalización de la corrupción como un proceso social” como lo expresa Arellano (2017), al decir del autor, este análisis propende trascender la visión individual de la corrupción, para entender la misma como un fenómeno social denso.